La primera edición de Santo Domingo Times ve la luz el 7 de agosto de 2003. Un año particularmente lleno de matices para la República Dominicana. Fundamentalmente, los efectos nacientes de la crisis bancaria de ese año contrastaban con el júbilo por la coronación de nuestra Amelia Vega, con tan solo 18 añitos, en el Miss Universo en junio de ese año.

Asimismo, el triunfo de unas Águilas Cibaeñas frente a México en la Serie del Caribe -piloteadas por Félix Fermín- y la designación del Big Papi, David Ortiz, como el MVP de la justa proporcionaban alegrías en todo el país. También fue el año de la celebración de los Juegos Panamericanos en Santo Domingo, precisamente en en el mismo mes que nació nuestra primera edición.

Entretanto, la lucha de los hermanos Reyes con los Elizondo en Pasión de Gavilanes enganchaba a todos frente al televisor. Mientras que el gusto de la juventud se imponía con la proliferación de la música de reggae y reggaetón en la radio de Santo Domingo. Una gran cantidad de emisoras difundieron ese género protagonizado por Tego Calderón, Héctor y Tito y Don Omar. También la música típica tuvo un gran repunte con la proyección que le dio Krisspy y el éxito Cuándo volverás, así como Yovanny Polanco. Pero tampoco se quedó atrás la bachata, con exponentes como Elvis Martínez, Luis Vargas, Joe Veras y Frank Reyes.

Y nace la primera edición

Primera edición de Santo Domingo Times

En todo ese contexto aparece Santo Domingo Times. La idea de Evelyn Betancourt Holt-Seeland se materializaba con el nacimiento de la primera revista por invitación de República Dominicana. Principalmente dirigida a los principales ejecutivos de importantes empresas del país, Miami y Nueva York. El objetivo era claro (y se mantiene hoy): conectar a través de la creación de contenido inspirador, emocionante y que agregara valor a la vida de las personas. Asimismo, con la generación de experiencias diseñadas cuidadosamente para nuestra comunidad.

En esa edición, con nuestro malecón de Santo Domingo como protagonista, reconocíamos la importancia del acervo histórico y cultural de Italia a la República Dominicana. También compartíamos el trabajo realizado por Bank Of América y celebrábamos los éxitos de un amigo de la casa, Tony Dandrades. De alguna manera, un opening para lo que hoy es uno de nuestros baluartes: el reconocimiento del talento de nuestra gente, en cualquier parte del mundo.

Hoy, cercanos a cumplir nuestra ‘mayoría de edad’ (18 años) y de publicar nuestra edición n° 100, contamos decenas de experiencias abiertas tras esa primera edición. Desde ese 7 de agosto de 2003, hemos tenido el honor de presentar en nuestras páginas historias de grandes personalidades. También hemos reseñado eventos nacionales e internacionales. Y, lo más importante, nos hemos convertido en una herramienta de promoción de nuestra República Dominicana y su valiosa gente. En venideras entregas estaremos contando y recordando algunos de esos hitos.