De rabiosa actualidad, el particular universo gastronómico de Rasmus Munk no deja indiferente a nadie. En los próximos días, de la mano de Gastronomic, tendremos la suerte de poder disfrutar de la impresionante cocina (y filosofía) de este fantástico chef. Nosotros te damos siete razones por la que no puedes perdértelo.

Porque es realmente único.

La concepción holística de la gastronomía que muestra Rasmus Munk es totalmente excepcional. A través de un sinfín de platos y numerosos estímulos sensoriales desarrolla su particular concepto culinario. 

Sentarse en la mesa de Alchemist es un auténtico viaje donde su idea del mundo o las incertidumbres y sinrazones de la sociedad contemporánea van de la mano de los placeres de la comida, dos hechos realmente antagónicos que sabe armonizar de manera magistral. 

Porque te hará pensar.

Bajo la idea de que el lujo gastronómico no está reñido con el compromiso, el chef utiliza la cocina para provocar la reflexión, la concienciación, hacer reír, excavar en la memoria y, sobre todo, sorprender. 

El lugar que ocupamos en la cadena alimenticia, la contaminación de plásticos en el océano, la donación de órganos, el bienestar animal o la explotación infantil son algunos de su amplio espectro de conceptos que ha expuesto en forma culinaria.

Porque vivirás un derroche de recursos.

Desafiando cualquier convención y bajo una inspirada exploración del potencial oculto de la comida como medio de comunicación, Rasmus Munk utiliza recursos como el trompe l’œil, la música, los efectos especiales, el teatro, las proyecciones o el arte en pro de su cocina transgresora, reivindicativa y provocadora.

El suyo es uno de esos restaurantes donde pasan cosas, muchas cosas. Una auténtica performance gastronómica.

Porque su comida es deliciosa.

Más allá de la fuerte carga conceptual, emocional o estética, la cocina de Rasmus Munk es extremadamente rica. Jamás, por muy bueno o rompedor que sea un concepto, llegará al menú del Alchemist si no logra alcanzar un sólido placer gustativo.

Justo en las antípodas de algunos chefs que intentan deslumbrarnos a base de fuegos artificiales fatuos y bling-bling de medio pelo. 

Porque tiene una grandísima proyección.

Munk es uno de los cocineros a los que no debemos perder el ojo, pues mucho va a influir en la gastronomía de los próximos tiempos. Incluso algunos lo apuntan como el relevo de Ferrán Adrià. Además, sus collab con Andoni Luis Aduriz o Kentaro Henry fueron memorables.

Porque comerás con un auténtico laureado.

Con sus dos estrellas Michelin, Alchemist se posicionaba en la lista del 2023 como el quinto mejor restaurante del mundo según The World’s 50 Best Restaurants, subiendo trece puestos con respecto a la del 2022. La elección como mejor restaurante de Europa por OAD, de Dinamarca por White Guide o el premio Art of Hospitality son algunos de sus numerosísimos reconocimientos.

Rasmus Munk in front of Wall of Taste in the development kitchen at Alchemist.

Porque es una oportunidad única.

Gastronomic nos ofrece la posibilidad de vivir esta apasionante aventura gastronómica aquí, en nuestro país. Si no la aprovechas, y quieres probar la cocina de Alchemist, tendrás que inscribirte en una interminable lista de espera, desplazarte a la capital danesa y conseguir uno de los escasos asientos que tiene el restaurante.

*Alquimia (RAE): Transmutación maravillosa e increíble.

Los alquimistas tenían como objetivo purificar, madurar y perfeccionar objetos físicos. Del mismo modo, nuestra meta es transformar y trascender la naturaleza de la comida y la gastronomía.

Mi propósito es que nuestros comensales disfruten de la experiencia gastronómica. Pero, a la misma vez, que el menú de Alchemist contribuya a sacudir conciencias y generar debates.

Rasmus Munk

El alma máter del Alchemist nació en 1991 en la pequeña localidad de Randers, al norte de Dinamarca. En numerosas ocasiones dijo que nunca estuvo relacionado con la gastronomía, pero su vida dio un giro cuando, con uno de sus mejores amigos de la adolescencia, empezó a estudiar cocina. Su pasión por el oficio fue inmediata. Tras algunos stages y trabajos fuera del país regresó a Dinamarca.  

En el 2015 abrió el primer Alchemist donde su creatividad, su forma de ver y entender la gastronomía despertó el interés de público y crítica.

Todo marchaba de maravilla, pero para Munk no era suficiente. A finales de 2017 cerró las puertas de su local y, un año y medio más tarde, inauguraba el nuevo Alchemist. Un espacio más exclusivo, impactante y absolutamente novedoso. Un lugar donde transgredir las normas sociales, donde desatar su anhelo de libertad.

Adentrándonos a The Alchemist

En las afueras de Copenhague, en el edificio que el Teatro Real Danés usaba para almacenar sus telones, se hallan los 2,200 metros cuadrados que ocupa Alchemist.

Dos enormes puertas de bronce dan acceso a cinco espacios diferentes, los escenarios donde Munk desarrolla su personalísima galaxia gastro. El salón principal, de 22 metros de altura, está coronado por una cúpula de planetario con doce proyectores para crear una imagen de 360 grados sobre los comensales.

El menú, de 50 pasos denominados “impresiones” y dividido en cinco actos, discurre en diversas estancias. Son más de cuatro horas de alta gastronomía para una experiencia sensorial que busca mucho más que satisfacer el paladar. 

Gastronomic

La fascinante plataforma ha conseguido traer a la República Dominicana lo más granado de la gastronomía mundial en cenas absolutamente memorables. Joan Roca, Massimo Bottura, Virgilio Martinez, Jorge Vallejo o Juanma Barrientos son algunos de los impresionantes cocineros que han pasado por este pop up. La última cita fue la de Rodolfo Guzmán que, desde su Borago de Santiago de Chile, nos dejó a todos embelesados.

Los próximos 14, 15 y 16 de noviembre tendremos al incomparable Rasmus Munk.

@gastronomicpopup

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