Las hermanas Pamela & Enilda Fernández, fundadora y directora creativa de la exclusiva firma de zapatos Made in DR, nos comparten todo sobre sus más recientes puestas en escena: la colaboración con Mónika Leschhorn y su colección Pádel, y lo que esto significa. 

Por años fabricaban zapatos con muy buena calidad, por manos dominicanas, para marcas internacionales. En 2014 surge la idea de crear una marca hecha en República Dominicana, específicamente en Santiago; con los mismos estándares de una internacional. Desde entonces, Quvel, la firma de calzado artesanal personalizado que se basa en transmitir un mensaje de exploración, libertad y expresión a una audiencia joven, nunca se ha detenido. Sin embargo, su más reciente aparición, en Indómita y en las canchas de Pádel, ha supuesto ciertos aires de reinvención y entusiasmo por un presente brillante, firme e interesantemente distinto. Las hermanas Pamela y Enilda Fernández, las caras y cerebro delante y detrás de la firma, nos comparten todo lo que está #happening, con ellas y con Quvel, en una amena conversación.

¿Qué supone repensar una marca y cómo lo han logrado ustedes?

Podemos decir que nuestro enfoque ha evolucionado, que cambiamos de imagen y ahora se trata de compartir una historia rica. Nuestra marca es más que solo una marca; es un estilo de vida y eso hay que comunicarlo. Nos emociona anunciar que vienen muchas novedades conectadas a este estilo de vida, donde hablamos mucho más que solo sobre zapatos. Además, planeamos expandirnos globalmente para llevar nuestra visión a todos los rincones del mundo.

Parte de este nuevo enfoque ha venido acompañado de una colaboración con Mónika Leschhorn, ¿Cómo surge esta colección y por qué Mónika?

Nuestra colaboración con Mónika Leschhorn es un reflejo de nuestra estrategia de unir autenticidad y estilo icónico. Queríamos trabajar con alguien auténtico, como Monika, cuya visión y esencia se alinean con los valores de nuestra marca. Juntos, hemos creado una colección que captura su espíritu único y lo fusiona con nuestros estilos más icónicos. 

Además, esta colaboración no solo celebra nuestras raíces, y dónde nació Quvel: en Santiago (de donde también es la mamá de Mónika), sino que también busca conectar profundamente con nuestros clientes en Santo Domingo y el resto del país. Es un tributo a la rica historia que compartimos, y a la vez, una invitación a todos a ser parte de este viaje donde el pasado y el presente se encuentran en cada diseño.

Cada pieza cuenta una historia, profundamente inspirada en el trayecto de Enilda Fernández, nuestra directora creativa y las ciudades donde ha vivido —París, Copenhague, Florencia y Nueva York— junto a la experiencia de nuestra fundadora, Pamela Fernández.

Su creatividad también se ha dejado seducir por la tendencia del Pádel, ¿Qué ha sido lo más retador de crear una colección cuyo punto de partida es un deporte?

«La Colección de Pádel» es, más que nada, un homenaje al espíritu dinámico del pádel, que a menudo es conocido como «el nuevo tenis”, así que lo entrelazamos con la historia y la elegancia atemporal del tenis. La presentación de las piezas fue durante un partido amistoso en el STI Racket Club, en Santiago. Cada pieza de esta colección está elaborada con cuero de primera calidad y exuda sofisticación y herencia. Orgullosamente hecha 100% por manos dominicanas, nuestra colección refleja una meticulosa artesanía y un compromiso con la excelencia, fusionando el deporte moderno con el estilo clásico.

¿Qué trae cada una de ustedes a la mesa y cómo se conecta con el propósito de una marca pionera de calzado artesanal de lujo que también es marca país?

Quvel se dedica a crear diseños clásicos y perenne, hechos a mano utilizando solo cuero de primera calidad. Cada pieza cuenta una historia, profundamente inspirada en el trayecto de Enilda Fernández, nuestra directora creativa y las ciudades donde ha vivido—París, Copenhague, Florencia y Nueva York. Esta rica amalgama de experiencias e inspiraciones se entrelaza con sus raíces dominicanas, celebrando la vibrante cultura y herencia de la República Dominicana. Junto a la experiencia de nuestra fundadora, Pamela Fernández, nuestro equipo en nuestra fábrica y con más de 30 años de trayectoria, nuestra marca es un testimonio de la exquisita artesanía, la inspiración global y una profunda conexión con nuestra tierra natal. Y podemos decir que nada nos hace sentir más orgullosos que eso.

¿Cómo se adquieren sus piezas hoy?

Pueden comprar a través de nuestra página web www.quvel.shop